Salvador Hernández Vélez: el peor rector de la historia de la UAdeC

El peor rector en la historia de la Universidad Autónoma de Coahuila, Salvador Hernández Vélez, está llegando a la conclusión de su periodo de una manera desastrosa.

Enfrenta siete investigaciones que involucran más de 4,800 millones de pesos cuyo destino aún no se conoce, según el Informe de Seguimiento de Resultados de Fiscalización al primer semestre de 2023 de la Auditoría Superior del Estado de Coahuila.

Además, sistemáticamente, de 2019 a 2022, durante la rectoría de Jesús Salvador Hernández Vélez, la Universidad Autónoma de Coahuila desvió un promedio de 5 millones de pesos anuales de su presupuesto, simulando contratar servicios de “difusión de la información” por adjudicación directa.

Estos recursos, en realidad, terminaron desaparecidos en una trama de factoraje financiero usando a una sociedad mercantil creada en Nuevo León, que se relaciona vía sus socios con 16 empresas más para dispersar el dinero.

Un total de 20 millones 160 mil pesos pudo ser verificado como daño a la cuenta pública de la máxima casa de estudios del estado durante los últimos cuatro ejercicios fiscales, mediante asignaciones y con-tratos que ni siquiera cumplieron con las formalidades exigidas por la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.

El rector ha pedido respaldo financiero para la institución, argumentando que la situación refleja las dificultades económicas de la educación superior en el estado. A pesar de las irregularidades señaladas, la universidad enfatiza la necesidad de mayores fondos federales, sosteniendo que su actual esquema de financiamiento es desigual.

Tampoco no mostró capacidad para dar buenas cuentas en cuanto a abatir la gran cantidad de “investigadores” y docentes que cobran horas y horas extras, pero no se sabe de qué.

Bajo su mando, la UA deC, es la institución coahuilense de las que cuentan con más cantidad de observaciones por parte de la Auditoría Superior del Estado por la opacidad con la que señalan se maneja y que año con año se dedicaba a “hincar el diente” al gobierno del Estado para cubrir el aguinaldo de la burocracia (y hasta las dos quincenas de diciembre).

Por cierto, ¿alguien sabe que pasó con sus libros?.